Depósitos a largo plazo

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Una de las fórmulas para mejorar la rentabilidad de los depósitos a largo plazo es ampliar su período de permanencia. Para llevarlo a 2, 3 e incluso más años. Se conseguirá generar unos tipos de intereses algo más competitivos, aunque sin excesos, entre el 0,80% y 1,50% aproximadamente.

Esta clase de productos de ahorro pueden contratarse a un plazo máximo de 5 años, en los que hay modelos destinados para todos los perfiles de clientes: crecientes, estructurados o referenciados a algún índice bursátil. Con aportaciones mínimas desde 1.000 a 10.000 euros, y en donde las posibilidades de rentabilizar los ahorros serán más amplias.

Por otra parte, requerirían de un excesivo tiempo en que no se podrá disponer del dinero, a no ser que se paguen las comisiones por su cancelación anticipada, bien parcial o total, que puede menguar sensiblemente la rentabilidad del producto bancario. No en vano, se desenvuelven en torno al 1,50% sobre la cantidad depositada.

La fórmula más habitual para contratar este tipo de productos financieros será a través de las imposiciones crecientes, en donde se aplica la premisa que a mayores plazos mejor remuneración. Pero no bajo porcentajes llamativos, sino que los intereses reales pueden alcanzar bajo esta estrategia en torno al 2,50%.

En los depósitos a largo plazo, por el contrario, faltan las ofertas promocionales o de bienvenida, y otras que están destinadas para captar el ahorro de los nuevos clientes. Por el contrario, los depósitos a largo plazo garantizan la totalidad de las aportaciones realizadas por los clientes. Dando una mayor seguridad a los impositores que tendrán su dinero seguro a través de estos diseños tan sencillos y tradicionales.

Los bancos desarrollan su oferta en estas imposiciones a través de una serie de propuestas, en donde tratan de llamar la atención de los clientes por medio de modelos cada vez más convincentes en sus formatos de formalización. Aunque lo difícil es encontrar una rentabilidad plenamente atractivas y como para destinar los ahorros a tantos años para su vencimiento.