Adiós a los tipos de interés extra

Tal vez usted que nos esté leyendo hace tan sólo seis meses esperaba el lanzamiento de nuevos depósitos a tipos de interés realmente apetecible por encima incluso del 5%, y tal vez ahora usted se esté planteando la inversión en derivados o CFD o la contratación de fondos de inversión, si esto es así el título de este artículo no le habrá sorprendido, si le ha sorprendido no se preocupe trataremos de explicarlo en el presente artículo.

Si se repasa la hemeroteca de la prensa especializada tan sólo seis o siete meses atrás encontraremos muchos artículos relacionados con lo que se esperaba fuera a convertirse en el boom de los depósitos.

Las especulaciones por entonces (y algunos movimientos de la propia banca) venían a decirnos que nos esperaban rentabilidades incluso superiores al 6% para depósitos de larga duración, rentabilidades interesantes desde luego que venían motivadas por el cese de la aplicación de la llamada ley Salgado impuesta en el año 2009.

Si uníamos lo anterior a la evidente necesidad de captación de fondos por parte de la banca en nuestro país parecía que el coctel estaba servido y que resultaba ciertamente lógico esperar y apostar por los depósitos mucho más rentables que los que habíamos tenido los últimos años.

Sin embargo si echamos un vistazo actualmente a los depósitos de entidades financieras españolas descubriremos que no sólo esta rentabilidad no ha aumentado sino que en algunos casos incluso ha descendido con respecto al año pasado; el motivo por si no lo sabe aún es una nueva limitación de los tipos de interés para este producto.

A fecha de hoy los únicos depósitos que superen estas rentabilidades (aun) contratables en nuestro país se corresponden con entidades financieras extranjeras que operan en nuestro mercado de productos financieros, por parte de las entidades españolas y tras la limitación impuesta estas altas rentabilidades ni están ni (al menos a medio plazo) se las espera.