Un paraíso fiscal es todo país o territorio con una política económica y de impuestos específica en la que se ofrecen beneficios a los fondos de empresas y particulares que, sin ser ciudadanos o habitantes de la región, se domicilien allí para que a efectos legales se les considere habitantes del lugar. De este modo quienes actúan así se benefician de importantes descuentos en el pago de impuestos con respecto a sus países de origen.
Existe una polémica con respecto a los paraísos fiscales, que lleva décadas siendo un tema que sobre todo preocupa a los países desarrollados cuando hay situaciones que les hacen tomar medidas de aumento de impuestos. Cuando esto ocurre, el número de transacciones que se realizan hacia paraísos fiscales aumenta, sobre todo depósitos de cantidades importantes que ciudadanos o empresas no quieren que se vean cometidos a unos impuestos altos y por lo tanto lo que buscan es no tener que pagarlos. Los defensores de las políticas fiscales acusan a quienes hacen estas cosas de insolidarios o incluso de defraudadores, mientras que quienes lo hacen se defienden asegurando que se trata de una operación absolutamente lícita y que cada uno puede hacer con su dinero lo que considere más conveniente.
Algo que se persigue en los paraísos fiscales es la falta de transparencia en las operaciones, ya que se asegura que es una forma que los grandes delincuentes económicos y traficantes utilizan para poder disponer de su dinero sin que las autoridades puedan hacer nada por evitarlo.