Depósitos vinculados a la evolución del oro

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Está completamente claro que los depósitos no es un producto que genera una buena rentabilidad en estos momentos, ni tan siquiera aceptable para buena parte de los pequeños y medianos inversores, que necesitan ampliar sus beneficios en los productos que les ofrecen las entidades de crédito.

La reciente decisión del banco central europeo de abaratar el precio del dinero ha propiciado que los intereses de los productos de renta fija se hayan desplomado al momento. Proporcionando no más del 0,75% en la mayoría de las ocasiones, bajo formatos muy sencillos que son aptos para todos los perfiles de clientes, incluso de los más inexpertos.

Una de las alternativas para solucionar la falta de rentabilidad de las imposiciones a plazo es vincular su producto al oro, o mejor dicho a la evolución en los mercados de este activo financiero. Como consecuencia de esta estrategia, se podrá incrementar la rentabilidad de los depósitos.

Pero siempre que se cumplan con los requerimientos de los metales preciosos, deberán exigir con una revalorización mínima en sus mercados financieros. De con no conseguirse, se recuperará la cantidad aportada, en su totalidad, con una mínima rentabilidad, y todo ello a su vencimiento.

El problema que plantean estos productos es que no pueden cancelarse, ni parcial ni totalmente. Y están destinados para unos plazos de permanencia excesivamente amplios, que oscilan entre 2 y 3 años, en los que estará el dinero retenido. Los importes mínimos, por otra parte, para acceder a ellos, están en función de cada diseño, pero normalmente pueden contratarse a partir de 2.000 euros.

Son unas imposiciones realmente convencionales, en donde la única diferencia con respecto a los otros, es su vinculación a este activo financiero. Que por otra parte, no se encuentra en el mejor momento de todos, ubicado en un canal bajista desde los últimos años. Restando competitividad a la comercialización del producto entre los clientes bancarios. Pero aun así, es otra alternativa que disponen para sacar provecho a sus ahorros, pero con una óptica diferente.